Este programa, denominado «Un niño, Un árbol», nace a partir de una ordenanza del 2009 y será llevada a cabo por pedido del Intendente Ferrer. Se implementará durante todo septiembre y contempla que cuando cada familia inscriba a su hijo o hija, recibirá un árbol del vivero municipal.
El anuncio fue confirmado por el Intendente Marcos Ferrer, quien estuvo acompañado por el Secretario de Gobierno y Asuntos Institucionales Juan Manuel Bonzano, Secretario de Relaciones Gubernamentales Diego Paulus y la responsable del Registro Civil María Paula Albornoz. El Municipio detalló que, teniendo como base la cantidad de niños y niñas inscritos durante cada mes, llevarán a cabo el mismo número de plantaciones, dando elegir a los padres si lo quieren en su domicilio equipo o en espacios públicos, los cuales tendrán que coordinar con un equipo técnico. Además, comunicaron que cada árbol contará con un listón que incluye el nombre y fecha de nacimiento del bebé, además de la especie arbórea seleccionada.
«Sumamos acciones que apuntan a mejorar nuestra relación con el medio ambiente y garantizar un entorno saludable para las futuras generaciones», comentaron desde el Municipio.